King Arthur: Knight's Tale - primeras impresiones

Neocore Games ha decidido volver a sus orígenes tras una buena racha con la licencia Warhammer 40.000. Con King Arthur: Knight's Tale, recupera su serie de RPG de acción estratégica y, de paso, se da un impulso hacia la nueva generación de consolas. Utiliza un estilo más oscuro y místico para reinterpretar la leyenda del Rey Arturo y mostrar una parte de su mundo que no se ha explorado en demasía. Muy pronto va a comenzar su travesía en Acceso Anticipado, pero Gamereactor ha tenido la oportunidad de probar una parte de este primer contenido durante un fin de semana para poder anticipar qué viene y cómo viene.

No el propio rey el personaje al que controla el jugador en este RPG, sino el caballero de la mesa redonda que se alzó contra él y acabó matándolo, Sir Mordred. También falleció en el enfrentamiento el protagonista, pero ahí no acabó su vida, pues la muerte de Arturo desató una maldición que liberó a todo tipo de criaturas demoníacas en el próspero reino de Britania. Para complicar aún más la situación, el viejo monarca logró esquivar la muerte total y volvió a la Tierra convertido en una versión aún más malvada de sí mismo, con un comportamiento totalmente opuesto a la lealtad de caballero que había defendido siempre. Solo Mordred puede hacer frente a tales desdichas y la mujer del lago lo ha resucitado para que complete su cometido de una vez.

De ti depende decidir cómo lo haces. Puedes ser un caballero honorable, dedicado a esta encomienda en nombre del reino de Camelot. O puedes ser todo lo contrario, un caballero negro que abusa del miedo y del poder para restaurar el orden es estas tierras. A medida que avanza la historia se van presentando varias decisiones en las que hay un componente moral, que a su vez va dirigiendo la trama por alguna de las ramas que los guionistas han construido. El gráfico de integridad va a estar siempre presente.

A los mandos, King Arthur: Knight's Tale se juega como un RPG en perspectiva isométrica cuando toca explorar los escenarios en busca de algo que echarse al bolsillo, ya esté oculto en cofres o en cadáveres. Los mapas están prediseñados, no son aleatorios. En el momento en el que entran enemigos en escena, la situación cambia a un combate de estrategia por turnos con movimientos y ataques limitados y asociados a un sistema de puntos de habilidad que se consumen en cada ronda.

De esta primera toma de contacto se deduce que la partida empieza muy fácil, construyendo una falsa sensación de que es todo pan comido y te puedes enfrentar a cualquiera por la fuerza, sin planear. Pero no mucho más tarde empiezan a llegar las batallas que requieren un esfuerzo, y si no sabes cómo apañártelas en un juego de estrategia por turnos, este acceso anticipado se te va a poder cuesta arriba. Las probabilidades de victoria se reducen considerablemente contra tipos muy duros.

Hay un abanico muy amplio de enemigos, incluso en esta versión tan prematura. Tan pronto te estás batiendo contra un humano armado con su espada y su escudo como tienes delante una horda de zombis que se abalanza sobre ti para arrinconarlo y estriparlo. También hay ya jefes a los que marcar de cerca que se caracterizan por tener mucha salud y ataques muy fuertes, además de un diseño original.

Pero tranquilo porque no vas a estar solo en este valiente cometido, pues otros caballeros de la mesa redonda se van a unir en la batalla. Traducido a gameplay significa que puedes llevarte a varios guerreros al campo de batalla y cada uno pertenece a una clase, con su set de movimientos definido. Si Mordred es defensor y destaca por su cantidad de armadura y de salud -pero pega poco-, Lady Dindraine es una tiradora brillante con el arco a distancia a la que hay que proteger porque cae pronto si recibe mucho daño.

Como buen RPG, cada uno de ellos va a ir progresando a través de subidas de nivel que van acompañadas de mejoras estadísticas y el acceso a capacidades adicionales. En esta primera versión Early Access el máximo es el nivel 5, pero el estudio húngaro comenta que en la versión completa no desatarán su máximo poder hasta el nivel 30. También da opción a personalidad un poco más a los personajes a través del equipamiento que se va recogiendo por las mazmorras. No es algo estético, son mejoras más que necesarias si no quieres pasarlo muy mal en las batallas.

Un detalle distinto es que el propio Reino de Camelot también puede evolucionar a base de oro y materiales de construcción. Son recursos que se consiguen al completar las fases, pero esta parte de momento no está desarrollada en esta versión previa.

El día de lanzamiento habrá un poco más de lo aquí visitado, como 18 misiones del modo historia, 25 personajes a reclutar, otras zonas abiertas y un poco más de desarrollo del sistema de moral. Pero teniendo en cuenta que esta será la versión ya a la venta, hay varias zonas que nos han dejado con ganas de más. Los tutoriales van al mínimo del aprendizaje necesario y algunas zonas están todavía muy limitadas a la exploración. También han ido saltando bastantes fallos y bugs en estos ratos. King Arthur: Knight's Tale tiene mucho potencial pero de momento no es capaz de demostrar cuánto puede dar de sí.

La primera toma de contacto con esta versión tan oscura de la historia del Rey Arturo es muy intrigante, pero tal vez ha sido prematura. King Arthur: Knight's Tale es una promesa hasta que esté implementado todo eso que promete el Acceso Anticipado, y será entonces cuando se pueda empezar a decir si este RPG que mezcla exploración a tiempo real y combates por turnos cumple con las expectativas.