Análisis de Main Assembly (PC)

Lo último de Bad Yolk Games ha encontrado el camino de salida del acceso anticipado. Main Assembly es un simulador de construcción de robots y vehículos con el que dar vida a todo lo que se le ocurra a tu mente creativa y sea capaz de respetar unas mínimas reglas de comportamiento.

No esperes una historia que te sirva de libro guía en este trabajo indie. Sencillamente eres el dron de drones, capaz de inventar, diseñar y ensamblar de todo. Pero tampoco vale hacer cualquier cosa, pues hay que producir un robot capaz de lograr los objetos que planea cada nivel (y que funcione, claro está). Ingeniería frente a creatividad.

Las herramientas que pone a tu alcance sirven para que puedas construir un aparato de cualquier tamaño y forma. Hay un montón de componentes con los que ir probando y modelos de cada uno de ellos para seguir intercambiando. Primero, un chasis al gusto uniendo y doblando láminas rígidas y después el resto de piezas como dirección, motor, ruedas, carrocería, etc. Cuando empiezas el montaje parece que no hay límites, pero sí que lo hay y es la simulación física.

Hacer que el robot funcione implica explorar sus sistemas programables y para ello hay que tener una noción mínima de electromecánica. No hace falta tener una ingeniería, ni siquiera recordar lo que aprendiste en las clases de tecnología del instituto, pero hay que darle sentido a las relaciones entre piezas. Es decir, hay que conectarlas de forma que haya relaciones de transmisión. Y cuanto más juegas más vas aprendiendo y comprendiendo, dando pasos hacia diseños más locos.

No os llevéis la impresión de que es un juego complicado porque no es así. Hay muchísimos tutoriales con los que ir aprendiendo paso a paso la esencia de los sistemas integrados, y con ese conocimiento puedes deducir lo que hace falta cuando lo pones en práctica. Está diseñado de forma que te va tentando a intentar hacer algo un poco más complejo cada vez, pasito a pasito. La experiencia que vas cogiendo en los niveles tutorial es esencial en el modo Challenge, que siga la misma dinámica pero ya presenta objetivos que dependen de tu robot: pasar por puntos de control, tumbar dummies, saltar sobre una zanja... La parte bonita es que nunca te pide algo tan complicado que te vaya a echar para atrás, que sabe tratarse y llevarte de la mano.

Solo con esos dos modos de juego ya hay contenido para rato, pero con una herramienta así en las manos es inevitable querer hacer un poco el gamberro y para eso está el modo Sandbox. Sin ataduras de ningún tipo, no solo puedes producir robots, es que además tienes la opción de dar forma al mundo y construir, por ejemplo, un circuito para coches o algo mucho más grande. Po último está Bot Battle, que es literalmente un multijugador online de combates de robots asesinos en escenarios que además están repletos de peligros.

Tengo la sensación de que está saliendo mucho ejemplo de coche o vehículo, pero ni mucho menos es el único tipo de aparato a fabricar. Qué menos que intentar hacer una araña mecánica al estilo de la Guerra de los mundos de H.G. Wells. Y ya que se dispara la fantasía, un auténtico OVNI siempre y cuando cumpla con los criterios de propulsión. Main Assembly no te va a negar nada si eres capaz de diseñarlo y programarlo.

El problema con este tipo de juegos que dan tanta libertad es que hay gente que se puede empezar a aburrir una vez que se queda sin un hilo que seguir. El número de diseños con los que probar antes de que te apague la bombilla es limitado, y como no te presiona ni te fuerza, a veces cuesta encontrar la motivación para intentar algo con sentido que sea realmente complejo.

Main Assembly, por otro lado, puede funcionar estupendamente como primera toma de contacto con la mecánica y la ingeniería para niños o chavales que estén pensando tomar ese camino, o incluso quienes vayan a empezar a practicar con CAD.

Este juego está muy bien hecho y planteado, tanto como forma de entretenimiento como herramienta de aprendizaje y de fomento de la creatividad. Es muy fácil adaptarse a sus botones y a su aspecto, y se preocupa por ir paso a paso para no sobrepasar a nadie con aspectos técnicos de la mecánica o la ingeniería. Te puedes pasar horas y horas en él probando de todo. Un producto muy concreto al que no le van a faltar usuarios.