Probamos F1 22, y parece otro paso en la dirección correcta para la serie

Ya han pasado más de doce años desde que el estudio de Southam obtuvo la licencia de Sony, que hasta mediados de los años 2000 contaba en exclusiva con el título del deporte de motor más rápido del mundo. Quizás hoy parezca una locura, pero, durante cinco años, entre 2003 y 2007, PlayStation era la única consola en la que podías conducir coches con licencia oficial de F1. Psygnosis, conocida como Studio Liverpool antes de que Sony la cerrase en 2012, llevaba la batuta en lo relativo a F1, pero sus juegos se quedaban estancados en la parrilla de salida. Eran impresionantes a nivel técnico, pero su enfoque estaba más centrado en la accesibilidad y el arcade que en la simulación pura. En definitiva, un juego esclavo de su época en el que las limitaciones técnicas eran las que dictaban la experiencia.

Desde que Codemasters se hizo con la licencia, cada nueva entrega ha supuesto un avance claro y conciso en el que la experiencia de F1 ha ido mejorando. F1 2021 no podía ser menos. Su atractiva dinámica de carrera y la excelente física de los coches ofrecían una experiencia de juego muy sólida que se adaptaba a la perfección, tanto si eras un principiante o un experto de las carreras. También era el último juego bajo el logo de Codemasters, y ya con Electronic Arts como nuevo propietario todavía hay preguntas sobre el futuro de la serie que están en el aire. Tras varias horas jugando F1 22, mis primeras impresiones son positivas. El juego viene con una serie de mejoras bajo el alerón, pero aún hay nubes grises en el horizonte.

La nueva normativa de chasis ha supuesto un cambio muy significativo en este deporte. Los coches son más pequeños y pesados, y la reintroducción de los efectos de suelo ha agitado la clasificación y las carreras en pista. La acción es más cercana, intensa y emocionante. Las revisiones del reglamento por parte de la FIA han tenido un impacto claramente positivo, y en este sentido Codemasters ha tratado de hacer que el juego de este año sea un fiel reflejo de la realidad en pista.

En primer lugar, los cambios se notan en el retoque de las físicas del motor y la simulación de los neumáticos, que ahora son más grandes (18" frente a las 13" de las temporadas anteriores). Todavía no está todo listo, y durante las vueltas a los circuitos de Imola y Silverstone (entre otros) es donde más he sentido el cambio en las físicas de los nuevos coches, sobre todo en las curvas, donde más se nota el incremento de peso. A pesar de no ser una simulación al uso, Codemasters está tratando de hacer una representación cada vez más exacta de cómo se comportan los coches rápidos en pista y, en comparación con otros años, las carreras están mucho más disputadas y apretadas. Es cierto que no soy un experto conductor de coches de F1, y menos aún los de este año, por lo que es difícil establecer una comparativa con otras temporadas. Sin embargo, en base a lo que he podido ver en las retransmisiones y lo que cuentan los pilotos sobre la nueva normativa y cómo se comportan los nuevos coches en las curvas, diría que Codemasters ha hecho una representación muy buena en F1 2022.

Una de las principales novedades de este año es el nuevo circuito. El Miami International Autodrome está representado en toda su riqueza y con todo lujo de detalle, una inclusión increíblemente rápida y que es más que bienvenida para la entrega de este año. Será el primero de los dos circuitos americanos que entrarán en vigor entre este año y el próximo, y cuenta con un total de 19 curvas y tres zonas de DRS que seguro darán paso a carreras brillantes. Además de todo esto, entre las nuevas características que ofrece Codemasters está la inclusión de una nueva inteligencia artificial adaptativa, cuyas dos variables (normal y completa) deberían ofrecer un grado de dificultad más dinámico que va cambiando durante el desarrollo de la carrera en función del rendimiento del jugador.

También se han introducido cambios en las paradas en boxes, el safety car y las vueltas de calentamiento. Ahora hay dos modos de configuración: uno más inclinado a la simulación pura en el que el jugador participa activamente y dirige los coches como de costumbre, y otro modo de transmisión en el que la IA toma el control y el jugador ve algo similar a lo que se ofrece en las retransmisiones de televisión. No es un cambio impresionante, pero tiene sentido para aquellos que quieran tener la oportunidad de escoger entre diferentes niveles de realismo. Además, F1 22 incluirá el tan esperado modo VR con soporte para una gran variedad de hardware, incluyendo Valve Index, Meta Quest 2, Oculus Rift S, HTC Vive y HTC Vive Cosmos. Esto nos parece un gran cambio, pero hasta ahora no hemos tenido la oportunidad de probarlo.

Algo que no estaba disponible en la versión de prueba, pero que nos gustaría comentar, es el modo F1-Life. Este nuevo modo intenta ofrecer una experiencia parecida a la de Los Sims, en la que tendrás la oportunidad de decorar tu casa con coches de lujo, muebles y vestir a tu personaje de maneras muy diversas. Todavía quedan muchos detalles por pulir, pero el tema de incluir microtransacciones hace saltar todas las alarmas. Para mí, el modo historia en un juego de carreras no debe ofrecer este tipo de realismo con el que solo se pierde tiempo. Todos estos recursos se podrían destinar a actualizar el arcaico motor Ego, añadir más contenido histórico o cualquier otra cosa que esté más ligada al deporte de la F1.

Otro detalle fundamental que sabemos que no estará en F1 22 es el porpoising que se produce en los nuevos coches por el llamado "efecto suelo". Este fenómeno hace que los coches reboten, sobre todo en las rectas y ha sido una de las características más destacadas y diferenciales en las cinco carreras disputadas este año. Codemasters ha comentado que era algo inesperado y que les ha cogido por sorpresa, pero al ver que se trata de una parte importante del comportamiento de los coches este año, me gustaría que hubiera una opción para poder activarlo. Todo sea por hacer un juego más realista. Aun así, es posible que los desarrolladores lo incorporen más adelante. Crucemos los dedos.

Con todo, la edición de este año del título de F1 de Codemasters parece ofrecer todo lo que nos gusta además de un puñado de cambios menores pero positivos. Las horas que he podido dedicar a los circuitos de Silverstone, Red Bull Ring, Las Américas, Imola y Miami han sido por lo menos igual de entretenidas que las de la entrega anterior, y los nuevos coches y físicas suponen una diferencia clara y notable para bien. La moderna inteligencia artificial también es una buena incorporación y estamos deseando mejorar nuestros tiempos en el modo VR. El 1 de julio saldrá a la venta F1 22, y para el aficionado de F1 será una apuesta segura que ofrecerá todavía más contenido del que ya podíamos disfrutar en las anteriores entregas.